¿Perdonar o no una infidelidad? Esta es la cuestión que mucha gente se plantea cuando pasan por esta circunstancia.
¿Se puede perdonar una infidelidad?
Si uno se plantea esta pregunta sin haber sufrido una infidelidad, la respuesta es clara. La gran mayoría de personas afirmaría rotundamente que no perdonaría una infidelidad. Es algo que simplemente no encaja dentro de la idea de confianza y fidelidad en la relación.
Pero una cosa es pensar en ello a priori y otra es hacerlo después de vivir una infidelidad. Aquí la respuesta no es tan sencilla. Es frecuente que las personas que atraviesan este dolor naveguen entre seguir adelante o no de forma constante. Es decir, por una parte, quieren que se repare el daño, que todo vuelva a ser como antes, pero por otra parte el dolor es tan grande que les cuesta poder recibir cualquier tipo de acercamiento y podría parecer que la única opción fuera decir adiós a la relación.

Por otro lado, la mente se verá asaltada con preguntas tales como: ¿Por qué? ¿Por qué con el/ ella? ¿Por qué si sabías que yo estaba sufriendo no lo paraste antes? ¿Por qué me lo negabas cuando yo lo sospechaba y me hacías sentir culpable a mí? ¿Qué habría pasado si yo no lo llego a descubrir? ¿Cómo has podido? ¿Cómo puedo volver a confiar en ti? Y un largo etcétera…
Cómo perdonar una infidelidad
Lo primero es entender que esta avalancha de preguntas es totalmente normal. Lo peor que se puede hacer en esta fase es intentar pasar página y hacer un “borrón y cuenta nueva”. De hecho, los intentos de perdón, no serán muy fructíferos en este momento.
Lo que sí que se puede hacer es poder expresar las preguntas una y otra vez. Estas preguntas necesitan ir acompañadas por respuestas por parte de la pareja. Respuestas que den confianza, que muestren comprensión y que denoten arrepentimiento. De esta forma, poco a poco, la confianza puede ir volviendo a construirse.

Esta etapa de preguntas y respuestas puede resultar muy incierta porque parece que las preguntas nunca acaban y que las respuestas nunca son suficientes. Sin embargo, desde la experiencia clínica, se ve claramente como hay un momento de cambio, de dejar de necesitar seguir en ese punto.
Será entonces cuando la confianza se ha podido volver a reconstruir cuando cabe hablar de perdón, de segundas oportunidades y de avanzar hacía un nuevo capítulo en la relación.
Por eso, respondiendo de nuevo a la pregunta de perdonar o no una infidelidad, mi recomendación sería primero recuperar la confianza y entonces ver si se puede dar ese perdón.
Y en segundo lugar, sólo se puede responder a esa pregunta con certeza cuándo se pasa por la experiencia. Lejos de lo que muchos puedan pensar, las personas que perdonad una infidelidad no son menos inteligentes, ingenuas o inconscientes. Suelen ser personas con una gran capacidad de adaptación, fuertes, luchadoras y resistentes.
Hay que verse en la situación para entender el proceso al que se han enfrentado.
Por último, perdonar una infidelidad nunca se debería hacer a solas, es decir, tiene que ser un proceso de dos. Se trata de reconstruir una relación rota y, para ello, la persona que ha sido infiel también tendrá que remangarse y poner todo de su parte para que funcione.
Aconsejo fervientemente a las parejas que pasan por esta situación que vayan a una terapia de pareja especializada en infidelidades como apoyo durante su recorrido de reconstrucción.
¿Tu pareja te ha sido infiel y no lo habéis superado? Te podemos ayudar. Llámanos al 692 79 68 59 o escríbenos a info@ipareja.com.